Primero, extiendo mis más sinceras felicitaciones al equipo de baloncesto del Fenerbahçe por ganar el campeonato de la Euroliga. Qué gran éxito para el deporte de este país. Quería escribir esta publicación la noche del campeonato porque se trata de la comunidad deportiva de Turquía. Necesitamos analizar adecuadamente la victoria del Fenerbahçe, el logro de su increíble entrenador, Obradovic. Desde 2013, ha trabajado con las personas adecuadas para mejorar constantemente el equipo en su camino hacia el campeonato. Su éxito en la creación de un oasis en medio del desierto no debe verse como nuestro éxito. Lo que quiero escribir hoy es sobre el desierto que hemos creado.

Cuando el equipo de fútbol de Beşiktaş fue eliminado de la Copa de Europa, los responsables de Galarasaray lanzaron tweets que destacaron el campeonato de la UEFA de Galatasaray hace 17 años. Estas son las mismas personas a las que aconsejé "sabio" en mi post titulado "Cómo revertir el declive aparentemente imparable de Galatasaray". También escribí que ya era hora de que mostráramos a esta gente la puerta. Para actualizar tu memoria, aquí hay un enlace a esa publicación: http://www.serhansuzer.com/tr/galatasarayimizin-onlenemeyen-cokusu-nasil-tersine-cevrilir

La semana pasada, el 17 de mayo, el Galatasaray Sports Club organizó un evento en Turquía al que fueron invitados los legendarios jugadores del equipo que ganaron la Copa EUFA.

Cuando ganaron la Copa de la UEFA hace 17 años

 

En las redes sociales, los fanáticos del Galatasaray celebraron frenéticamente la victoria de la Copa de la UEFA 17 años atrás. Siempre disfruto de la vista de ex jugadores en eventos como este y siempre estoy feliz de ver leyendas de Galatasaray como Prekazi, Turgay y Hasan Şaş. Sin embargo, un fan incondicional del Galatasaray como yo, me he desanimado por estas celebraciones. Aqui hay algunas fotos del evento:

En efecto, este logro siempre será una fuente de orgullo y alegría para todos. Sin embargo, continuan celebrándolo como si fuera un festival anual a pesar de no haber obtenido ningún otro logro y en mi opinión ya suena un poco vacio. De lo que me gustaría hablar es del deterioro del rendimiento de nuestro equipo este año, nuestro balance y las estadísticas con las que medimos el éxito.

El año pasado, el 19 de mayo, recuerdo haber leído este titular en Hürriyet, un periódico líder: una fiesta juvenil y deportiva en la que recordamos a Atatürk, "Aquí está el modelo del Galatasara del 201. “Aquí está el artículo: http://www.hurriyet.com.tr/sporarena/galeri-iste-4-buyuklerin-yeni-sezondaki-kadrolari-40462697#page-15

Este tipo de opiniones vacías me deprimen. Esto es lo que pienso:

Somos testigos de lass mismas promesas vacías todos los años. En un entorno en el que se supone que uno de los tres grandes equipos de Estambul ganará el campeonato (y hay que tener en cuenta que, aunque no sucede, los equipos aparte de los tres grandes que han ganado), los presidentes y los directores de la otros clubes comienzan a verse. La prensa ya ha reflejado esto o comienza a agitarse para mayor audiencia con noticias sobre los tres grandes equipos que han perdido la esperanza de ganar el campeonato. Comienza la transferencia de todos los jugadores principales del mundo a Galatasaray, Fenerbahçe y Beşiktaş. Messi y Ronaldo son los únicos jugadores a quienes no se les acercan. Los jugadores vienen y van. Cuando hay noticias de un jugador estrella transferido por un gran club, los otros dos clubes intentan aliviar la presión que tienen, lo que significa comenzar el proceso para transferir diferentes jugadores de ese mismo país.

"Bonificación de Anelka"

De todas las transferencias, la que más rei fue la del delantero francés Nicolas Anelka. En ese momento, el Fenerbahçe realmente había transferido muchos de los mejores jugadores. Por ejemplo, lograron traer a Turquía a la estrella mundial Roberto Carlos. Anelka puede haber llegado al final de su carrera, pero aún era una leyenda y su llegada al Fenerbahçe fue emocionante, especialmente para ese club. Todo el mundo esperaba que el Galatasaray respondiera con una transferencia similar de alto perfil, pero en su lugar se decidieron por un jugador que todos consideraban fuera de forma y no del todo atractivo: Franck Ribery.

De izquierda a derecha, jugadores de la selección francesa Ribery y Anelka

 

Cuando Ribery llegó al Galatasaray, todos los fanáticos del Fenerbahçe se burlaron de nosotros al referirse a un commericial de televisión que era popular en ese momento. "La bonificación de Anelka llego", decían. Luego vimos lo que podría hacer ese "bonus". Un jugador que era joven, pero que tenía un inmenso potencial, la carrera de Ribery se elevó a alturas increíbles. Incluso podría decirse que la carrera de Ribery, que sigue siendo un jugador destacado en el Bayern de Múnich, ha eclipsado al de Anelka. El único inconveniente fue que todos en el equipo de Galatasaray estaban tristes de verlo partir después de solo un año. Es una prueba adicional de nuestra debilidad gerencial.

Siguiendo e imitando en lugar de liderar

Los tres grandes equipos, que se controlan mutuamente, copian los movimientos de los otros y tratan de mantenerse al día, solo se preocupan por no quedarse atrás. ¿Cómo es eso por un sentido de visión? Deciden un curso de acción simplemente para que nadie les pregunte por qué no hicieron lo que hicieron los otros dos equipos.

No tienen un plan maestro o directores profesionales que puedan implementar un buen plan. Todo lo que hacen es pelear entre ellos y hacer anuncios llamativos para mantener felices a sus fanáticos, etc. ¿El resultado? Los clubes turcos de fútbol se quedan en el camino, se agrupan como buitres y son goleados cuando compiten por las copas europeas.

Mi generación hizo un progreso serio en lo que respecta al fútbol turco. Escribí sobre esto en una pieza titulada: "El ego será nuestro fin". A continuación encontrará un extracto de esa publicación (http://www.serhansuzer.com/tr/biz-bitti-demeden-bitmeyecek-ego) en la que relato una experiencia que tuve hace mucho tiempo.

"... en aquel entonces (hasta los años 90) estábamos tan resignados al fracaso que nos regocijamos si nuestro equipo perdía por un pequeño margen. Afortunadamente, el complejo de inferioridad de mi generación, nos hacia decir: "Perdimos, pero al menos no nos aplastaron", ahora es cosa del pasado. Tengo vívidos recuerdos de cómo era entonces.

Por ejemplo, entre las edades de 11 a 16 años fui a la escuela de verano en Inglaterra. Puedo decir que esos veranos fueron los más agradables de toda mi juventud. En aquellos años, recuerdo que fuimos vencidos por Inglaterra con un 8-0. Cuando nos instalamos para ver un partido contra un equipo europeo, particularmente de Italia y España, bromeábamos: "veamos con cuánto goles nos ganan en esta vez". Esta broma naturalmente afectaba nuestro sentido de la confianza y nos hizo incluso fanáticos más decididos y feroces cuando veiamos un partido. También recuerdo los períodos en los que ganamos todos nuestros partidos o en los que perdimos contra aquellos que nos ridiculizaron por un pequeño margen cde 4-5.

Desde un par de chicos pasando una pelota a un campo de fútbol real ...

En realidad, desde la fundación de la República, mi generación ha llevado a Turquía al siguiente nivel en varias áreas, incluido el deporte. Daré un ejemplo, de mis años universitarios. Durante una de mis vacaciones de verano fui a la Universidad de Harvard para tomar clases de macroeconomía y álgebra avanzada para las cuales recibía créditos en la universidad en la que asistía en Canadá. Tenía dos compañeros de cuarto en Harvard. Uno de ellos era un ingeniero informático llamado Peter, un entrañable chico de ojos almendrados con un acento sureño con el que conversaba cuando tenía oportunidad, pero que casi siempre estaba en el laboratorio de informática. Mi otro compañero de habitación era Austin, un tipo alto y apuesto que jugó fútbol profesional en Colorado. Austin y yo siempre saliamos juntos. Cuando nos enteramos poco después de conocernos que ambos compartíamos pasión por el fútbol, ​​encontramos una pelota y comenzamos a jugar juntos en el campo de Harvard. Cuando otros  nos vieron jugar, se unieron a nosotros. Al final del primer día, eramos 6 o 7 personas. Eramos una multitud aún mayor al día siguiente, y los integrantes solo aumentaban. Austin y yo obtuvimos reputación como jugadores de fútbol. Cada vez que alguien quería jugar nos llamaban. Al final del primero de mis dos meses en Harvard, había demasiados de nosotros para meternos en el patio y comenzamos a organizar torneos en un terreno de juego real al otro lado del río en Boston. Era muy divertido. Un día, Austin me preguntó: "Serhan, llevamos un mes jugando al fútbol y te dije dónde juego, pero nunca hablas de tu carrera. ¿Dónde juegas? "Estaba bromeando, así que le dije a Austin que jugaba para el equipo PAF de Galatasaray. "Puedo apostarlo", respondió. Yo solo sonreí. De hecho, no tenía experiencia profesional. Sobre todo, acababa de patear una pelota con mi hermano gemelo o jugar con los niños en las calles donde crecí de Bebek. Solo por diversión, también jugué en el equipo de mi escuela secundaria. No hay nada profesional en mi experiencia o enfoque en el fútbol, ​​pero, como aficionado, soy un apasionado del deporte y doy todo cuando lo practico.

El éxito de mi generación en el fútbol

 

De repente ese verano en Estados Unidos , me consideraron una especie de "estrella" por mi nivel de fútbol. A pesar de que jugaba de defensa en la escuela secundaria, en los partidos en Estados Unidos me moví directamente a la posición central y era el capitán del equipo. También tengo que decír que haya mejorado mucho debido a la frecuencia de nuestros partidos y sesiones de práctica. Era conocido en Harvard como el turco que era bueno en el fútbol. Pocos días después de mentirle a Austin, volví a plantear el tema y admití que había estado tomando conciencia de mi experiencia futbolística. Al principio no me creyó. Después de que repetidamente le aseguré que era la verdad, me dijo: "Bueno, entonces, ¿cómo puede un aficionado jugar así de bien? No puede ser por el nivel de juego en Turquía, ya que todos vemos lo mal que Turquía lo hace en los torneos ". Instintivamente salté a la defensa de mi país al decir:" Es cierto que el equipo nacional turco no lo ha hecho bien en los torneos, pero eso no significa que nunca lo harán. Ya has visto cómo juego. No soy bueno en comparación con los de mi generación. Te sugiero que mires cómo juegan los turcos de mi edad. Tendremos éxito en el futuro". Mis palabras demostraron ser proféticas. Galatasaray ganó primero la Copa de la UEFA y luego la Supercopa, y el Equipo Nacional de Turquía quedó tercero en el mundo. Los jugadores eran todos de mi generación".

Aparte de los éxitos que publicamos a finales de los 90 y en la primera década de este milenio, no hemos logrado nada. Esto es cierto no solo el Galatasaray, sino del fútbol turco en general. Vimos una ilustración en vivo de esto la semana pasada.
Las celebraciones que rodearon la victoria de una copa hace 17 años me plantearon algunas preguntas:

1. ¿Los equipos como Real Madrid, Barcelona, ​​Manchester United, Chelsea y Bayern Münich, que han ganado copas varias veces, toman algunos días en mayo todos los años para conmemorar sus victorias como nosotros?

2. ¿Cómo han logrado estos equipos pasar del éxito al éxito en lugar de regodearse con un solo campeonato?

Escribi sobre esto repetidamente y lo haré de nuevo aquí. Es obvio lo que el fútbol turco debe hacer para alcanzar el nivel de los otros grandes clubes en Europa. Tomar un enfoque a largo plazo. Todos necesitarán ser pacientes y respetuosos. Describo a continuación lo que se debería hacer:

1. Tener un plan maestro: cada club de fútbol turco debería preparar un plan maestro y tomar todas las medidas posteriores. En lugar de aspirar al éxito instantáneo, el plan debería cubrir los proximos cinco a diez años y construir constantemente sobre sí mismo.

2. Las buenas comunicaciones: este plan debe explicarse claramente a todos los interesados, especialmente a los fanáticos. Somos personas impacientes. Pero si el curso de acción previsto y todos sus detalles son compartidos con los fanáticos, los miembros del club, la prensa y todos los demás interesados, creo que todos mostrarían algo más de paciencia y harían lo que pudieran para contribuir. También es importante durante este proceso dentro de los clubes individuales hacer un buen uso de la prensa, los medios, las redes sociales y los canales de comunicación.

3. La infraestructura: sobre todo, necesitamos invertir tiempo y recursos en infraestructura a la brevedad posible. La razón por la cual la infraestructura no se ha priorizado previamente es que no produce resultados instantáneos. Es decir, una inversión que sea realizada hoy mostrará resultados solo en cinco años. Desafortunadamente, ningún director del club (y esto a pesar del hecho de que algunos han ocupado ese puesto durante 20 años) es tan paciente. Para obtener resultados instantáneos, en su lugar gastan el doble de lo que necesitarían gastar en infraestructura con la firma de jugadores estrella. Es una lástima. No deberíamos perder un segundo más en declarar que la infraestructura es nuestra principal prioridad e invertir en ella.

4. Los balances: se debe abordar la salud fiscal de los clubes. Eso significa equilibrar los libros. Está claro lo que debe hacerse. Encuentre formas de aumentar los ingresos. Además de los modelos clásicos, los modelos creativos deben implementarse con ese mismo fin. Los gastos deben ser frenados y aquellos con intereses creados deben ser despedidos. Esto también se puede lograr solo con un plan maestro que se lleve a cabo al dedillo. No olvidemos que el deporte es un sector superior en estos días y el éxito deportivo depende del éxito financiero.

5. Las calificaciones: los directores de los clubes y federaciones deportivas, los árbitros y todas las personas empleadas por la organizacion y los grupos relacionados deben ser contratados o promovidos basándose únicamente en sus calificaciones. Los males de este país empiezan por el amiguismo. Pon a las mejores personas a cargo es tan simple como eso.

6. La educación /y el entrenamiento: por lo que he podido ver como observador, es que la mayoría de los jugadores de fútbol turco son ignorantes. No pueden manejar la fama y la fortuna a una edad tan joven. Brillan por un tiempo, pero no pueden mantener un alto nivel de rendimiento. No hablan un idioma extranjero, lo que les dificulta jugar fuera de Turquía. (La excepción son los jugadores turcos de Alemania y Holanda. Debido a que crecieron en Europa, hablan varios idiomas y se les inculca la cultura occidental). De hecho, cualquier jugador que quiera destacar en su juego debería obtener alguna experiencia en el extranjero. En resumen, es importante poner más énfasis en entrenar a todos nuestros jugadores de fútbol. Necesitamos establecer un sistema en el que vayan a la escuela secundaria o incluso a la universidad, como en Estados Unidos, mientras juegan al fútbol. Por encima de todo, necesitan aprender sobre la vida desde una edad muy temprana. Sería de gran valor para ellos aprender en la escuela de la vida como mantener un sentido de la modestia, equilibrar su presupuesto, modales y la forma correcta de expresarse. De lo contrario, están obligados, después de un tiempo, a perderse en el olvido de Turquía.

7. Los espectadores: estos también necesitan rehabilitación. Ya no queremos espectadores que dicen malas palabras, que pelean, que insultan al equipocontrario, que se conforman con menos que un campeonato. No los queremos ni en el fútbol ni en ningún otro deporte. Aquellos que insisten en este tipo de comportamiento deberían ser excluidos de los estadios y se les revocaria la membresía de su club. Necesitamos más familias y fanáticos que se porten bien en nuestros estadios.  Hay que recordar: el fútbol es un escenario y la gente en este escenario es un ejemplo para el país.

8. Límites de mandato para los directores de clubes y federaciones: el titular del registro es el difunto İlhan Cavcav, que fue presidente del club durante aproximadamente 40 años. Podría haber sido dueño del club, pero al menos podría haberle entregado la presidencia a su hijo. Siempre se necesita sangre fresca. En los primeros años, İlhan Bey hizo un buen trabajo como presidente, pero no se puede decir lo mismo de los últimos años, cuando cometió una serie de errores, incluido el cambio constante de su director técnico. Aziz Yildirim lo incluirá en los libros de registro como la persona que sirvió el término más largo para uno de los tres grandes clubes. Lo que es realmente importante es pasar a la historia como alguien que hizo un gran trabajo, incluso si fue por un período relativamente corto. Creo que las afirmaciones de que la renuncia causaría que el club se "derrumbe" o que "se hagan cargo" se han quedado obsoletos. Conozco al menos a cinco personas con la capacidad de asumir la presidencia del Fenerbahçe una vez que Aziz Yıldırım se haya ido. Son todas personas con el potencial de llevar al club a un mayor éxito. Se necesita sangre fresca en todos los clubes y federaciones deportivas. Necesitamos limstts a plazo. Diez años es suficiente, o tal vez 15 para casos inusuales. Decir lo contrario es entregar clubes históricos de propiedad pública a una sola persona. Y eso estaría mal.

9. Las transferencias apropiadas: escribí sobre esto en una publicación anterior. Definitivamente necesitamos transferir jugadores menores de 25 años con un potencial serio. Tenemos que dejar de transferir jugadores mayores que vienen aquí antes de retirarse. Al transferir jugadores jóvenes con un potencial, no solo traemos futbolistas, si podemos hacer más contribuciones al club (estos días no se puede ganar un partido sin jugadores que puedan correr y estar constantemente al ataque) sino también cuyas tarifas de transferencia puedan ser una buena fuente de ingresos futuros.

10. Los directores técnicos: en comparación con el fútbol, ​​es relativamente fácil lograr el éxito en el baloncesto. Un presupuesto de 25-30 millones de euros le permite competir contra los mejores equipos de Europa. En fútbol, ​​esa cantidad solo sería suficiente para evitar que su equipo quede relegado a una liga inferior. Escribo esto solo porque el tema aquí es fútbol. Esto no le quita nada al éxito del Fenerbahçe en el baloncesto. Todos vimos al legendario entrenador Obradovic. Creó maravillas con las transferencias correctas y con jugadores jóvenes. Necesitamos grandes directores técnicos de fútbol que trabajen con un equipo para invertir en infraestructura y fortalecer sus clubes con la transferencia de jugadores jóvenes con alto potencial. Tengo tres candidatos diferentes que podrían ser este tipo de director técnico para Galatasaray, el equipo que apoyo. Y hay una cosa más. El fútbol se ha visto muy dañado por ciertas actitudes: "Bueno, no ganamos el campeonato este año. Los espectadores están gruñendo. Adiós. "Los directores técnicos exitosos son completamente responsables de todo lo relacionado con el equipo deben ocupar ese puesto el tiempo suficiente para hacer los planes a largo plazo. El éxito puede ser planeado.

Permítanme aprovechar esta oportunidad para expresar mi deseo de que el deporte, que en muchos sentidos es el espejo de un país, se desarrolle y crezca constantemente, que el éxito del Fenerbahçe en baloncesto se repita en el deporte más popular, el fútbol, y que el fútbol turco en general finalmen llegue a todo su potencial

 

Cuidense

 

 

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