En los últimos días, estoy bromeando diciéndole a mis amigos: “Hemos llegado a la mitad del camino”.​

Hay un poema que todo en Turquía conocemos, llamado “35 años.”La razón de este brillante poema (para leerlo:http://siir.gen.tr/siir/c/cahit_sitki_taranci/otuz_bes_yas_siiri.htm).

escrito por Cahit Sitki Taranci, que nació en 1910, llego a ser tan famoso no solo por el hecho de que estaba muy bien escrito sino porque es una pieza significativa que nos hace entender que, al igual que los demás seres vivos de la tierra, la vida humana tiene un final.

Después de que este poema fuese escrito, en la primera mitad del siglo 20, las condiciones y la naturaleza humana han cambiado mucho. En el siglo pasado, las duras condiciones de vida, los problemas que surgieron a partir de la desnutrición, las epidemias, la medicina era insuficiente para tratar la mayoría de las enfermedades de la época y las dos guerras mundiales que existieron, eran factores que acortaban la esperanza de vida. En la primera mitad del siglo que vivimos el 21, los niveles de vida en muchos países alrededor del mundo aumenta, el problema de la nutrición en todo el mundo, excepto en el continente africano (en realidad, debido a la población cada vez mayor y el número limitado de los recursos , el agua y la escasez de alimentos seguirá siendo una amenaza para la humanidad) se resolvió con tecnologías en este campo (invernadero sin suelo, por ejemplo), con los avances en la medicina la cura de muchas enfermedades que se consideraban fatales se encontraron y no hubo guerras mundiales (por desgracia, todavía hay guerra en algunos países) y esto a su vez extendió la esperanza de vida. En estos días, el número de personas que viven más de 90 años aumenta día a día. En otras palabras, si no hay accidentes, 35 años no es la mitad del camino, pero es 2/5 de la misma.

Si tenemos que estudiar mi vida, puedo decir que ha pasado por tres etapas. Voy a escribir más sobre ellas más adelante, porque creo que mi experiencia será beneficiosa para mucha+ gente. En breve, la primera etapa consiste en los momentos más cómodos, bellos y lejos de toda clase de responsabilidades.

 

 

En cuanto a los primeros niños nacidos como la tercera generación de la familia Süzer, puedo decir que nosotros, mi hermano gemelo Baran y yo, tuvimos una infancia feliz. Hemos crecido en una familia grande (además de nuestros padres, mi abuelo, mi abuela, mis tíos y mis tías estaban a cargo), tanto en Estambul como en Gaziantep. Además, mi escuela primaria, secundaria y universitaria todos ellas tienen su propia belleza.

 

 

Realmente, la vida durante los años que fui a la escuela fue muy agradable. Por supuesto, hubo un fin a este lecho de rosas.

 

 

Mientras estaba en los Estados Unidos trabajaba en Generali Sigorta, hasta que mi padre me dijo que regresara y con eso se inició la segunda etapa de mi vida. Inmediatamente me fui al servicio militar, pensando que entraría en la vida empresarial justo después. El servicio militar lo hice en Denizli durante 8 meses y para mí no fue nada fácil. Durante mi servicio militar llegué a conocer verdaderamente nuestro país y su gente. Aunque fue duro, el servicio militar tiene un lugar importante en mi desarrollo personal.

 

 

El día en que terminó mi servicio, nuestro banco fue confiscado y me di cuenta claramente que la vida no seria era lecho de rosas. Voy a escribir en detalle sobre este tema más adelante. Sin embargo, por ahora puedo decir que mi entrada en la vida empresarial fue como alguien que está a punto de aprender a nadar siendo empujado por detrás y cayendo en un oleado mar al que estaba mirando desde el muelle. La vista en la segunda etapa de mi vida: Kentbank fue confiscado, nuestra reputación estaba dañada, fueron congeladas todas nuestras cuentas bancarias, y habíamos pasado por los más críticos dos meses para la apertura de la cadena de hoteles de fama mundial Ritz-Carlton, etc. Hemos pasado por muchos momentos dolorosos y difíciles. Gracias a Dios, hemos superado todos ellos. Por supuesto que no fue fácil. Durante años, hemos trabajado pacientemente día y noche para resolver todos estos problemas y hemos encontrado solución a cada uno de ellos. Hemos ganado todos los casos judiciales sobre el banco, incluidos los que tienen el Consejo de Estado y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

 

 

La tercera etapa de mi vida comenzó el año pasado. Cuando comencé mi carrera en el negocio familiar, me prometí que si las cosas iban bien en la compañía familiar en los siguientes 10 años me gustaría abrir una nueva página en mi vida y dedicarme a empresas que de verdad me gustasen y que fuesen excitantes para mí. El año pasado, en noviembre, dejé el cargo de director general de KFC y Pizza Hut Turquía y entre en el sector de la energía solar.

En esta tercera etapa todo es diferente para mí. Determinar las reglas en una medida considerable en esta etapa. Trato de verme con los amigos con los que me gusta compartir, como la comida que me gusta a ciertos intervalos y en mis restaurantes favoritos. Escucho música, leo libros y viendo documentales es con lo que disfruto. Por supuesto, todo esto requiere un esfuerzo enorme, porque todos vivimos una vida acelerada y la mayoría de las veces no podemos alcanzar su velocidad.

Tal vez, la mayor diferencia entre mi pasado y el presente es la siguiente. En el pasado, todo era más tranquilo. El número emociones en nuestras vidas rutinarias podrían ser planificada. Ahora, todos los días tienen una emoción diferente. Esto puede ser agradable a veces, pero a veces puede causar un estrés grave en la persona. Algunas noches hasta puedo perder el sueño.

En realidad, hay muchas diferencias entre mi pasado y mi presente. Por ejemplo:

En el pasado, no era capaz de comer cualquier cosa solo cocina turca. De hecho, recuerdo que mis amigos franceses me llevaron por primera vez en mi vida en 1995 cuando yo era todavía estudiante de primer año en la universidad a un restaurante de sushi. Casi vomito la primera vez que probé el sushi. Hoy, siento que puedo comer sushi casi todas las semanas y puedo disfrutar de diferentes cocinas (peruana, tailandesa e italiana son mis preferidas. Claro la cocina turca sigue siendo mi favorita).

En el pasado antes de hacer algo, yo solía pensar mucho sobre el tema en todos los aspectos. Hoy en día, actúo de inmediato de acuerdo con mis pensamientos, al igual que el lema de Nike (Just Do It). La razón es que me di cuenta que si se comete un error luego puedo corregirlo. En otras palabras, actuar sin el temor de cometer errores es mucho mejor que no hacer nada en absoluto.

En el pasado, el mosaico de nuestro país era una fuente de alegría, porque todo el mundo estaba aprendiendo cosas nuevas el uno del otro. Hoy en día, en nuestro país hay brechas que se hacen más y más hondas cada día. Así que, por desgracia, vemos una distinción como “los que estamos y los que no lo están.” Esta es la mayor amenaza formada en nuestro país.

Nos dejamos llevar por la fiebre del pop turco que se inició con Ajda Pekkan, Sezen Aksu y Yengi Askin Nur en el pasado. Hoy en día, disfruto mucho de diferentes géneros musicales como la bossa nova, jazz, rock, salsa, reggae, hip-hop, etc. (Por desgracia no podemos decir que la música pop turca haya hecho un progreso importante desde entonces. Necesita mejorar . Hay que dejar a un lado la imitación y dar creación a piezas originales).

En el pasado, solíamos ver películas americanas, pero ahora vemos más que antes películas turcas. Por supuesto que me gusta ver películas de Asia y Europa, además de estas. Son el reflejo de la cultura del país y esto me da placer.

En vez de ir a los mismos lugares que en el pasado, ahora me gusta visitar diferentes lugares de nuestro país (Mardin, Manisa, Balıkesir, Van, etc.) Me gusta visitar el extranjero (Costa Rica, India, Argentina y Kazajstán, etc) y conocer diferentes culturas.

Internet provocó un cambio importante en nuestras vidas. La vida económica se aceleró. Tenemos que responder correos electrónicos en un tiempo determinado. Estoy en contacto con todos mis amigos en Turquía y aquellos alrededor del mundo gracias a los medios de comunicación social y la capacidad de compartir el trabajo que hago con ellos es algo fabuloso.

Todos estos cambios en mi vida son relacionados con la madurez. Las personas también pueden cambiar físicamente. Soy un poco suertudo en esto. Por el momento, no he cambiado mucho físicamente (mis amigos de la escuela intermedia y secundaria que no me han visto por muchos años todavía pueden reconocerme), pero sé que este no será el caso dentro de 10 años. La gente puede cambiar físicamente, pero lo importante es mantener la coherencia del alma. Aquí, me gustaría enumerar los elementos en mi vida que no han cambiado y no cambiaran en el futuro:

El compromiso y el amor por mi familia, Pasar a la acción después de pensarlo concienzudamente, Mi hambre por aprender y mi actitud curiosa, El respeto que tengo por las diferentes culturas, Mi capacidad de sentir empatía, Siempre se siente orgulloso de ser ciudadano de la República de Turquía y de ser un ciudadano del mundo, al mismo tiempo, Mi Ataturkismo.

El deseo que siempre tengo de mejorarme a mi mismo: Para mí, todo el mundo puede mejorar en toda edad. Siempre he leído, me siguen de cerca la tecnología y voy a cursos para mi desarrollo personal cuando encuentro tiempo para ello. Por ejemplo, he aprendido el idioma español después de los 30 años yendo a cursos de fin de semana. Ahora asisto a cursos de lengua de signos. He leído decenas de artículos cada semana acerca de la energía solar. Me siguen de cerca los desarrollos tecnológicos en los campos que estoy interesado.

Con todo, he experimentado muchas cosas hasta esta edad. Puedo decir que tengo experiencias que pocas personas de mi edad son capaces de alcanzar. Voy a seguir mejorándome a mí mismo, y hacer los esfuerzos necesarios para que las personas cercanas a mí estén bien y voy a trabajar para que la humanidad progrese.

Tengo 35 años de edad, yo no sé dónde estoy en el camino, pero aquí hay algo que sé: voy a seguir contribuyendo todos los días con la humanidad. Al hacerlo, no voy a negar que dé placer a mi vida.

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